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La receta es tan sencilla como la anterior y, tras varias elaboraciones, descubrí algunos secretitos que comparto en esta oportunidad.
INGREDIENTES
- 4 bananas medianas maduras
- 200 grs. de azúcar
- 50 grs. de manteca a punto pomada
- 1 huevo
- 280 grs. de harina leudante
- 300 grs. de dulce de leche pastelero
ELABORACIÓN
- Pisar las bananas en un bol hasta que formen un puré homogéneo.
- Incorporar el azúcar y mezclar bien.
- Añadir el huevo y seguir removiendo para unirlo al puré.
- Ablandar bien la manteca, dejándola fuera de la heladera un rato antes y aplastándola en un plato con una cuchara. Incorporar al puré y mezclar bien para unificar.
- Añadir la harina con paciencia, incorporándola a la mezcla anterior con un tenedor.
- Colocar la mitad de la masa en un molde para pan. Yo usé uno de 7,5 cm. de alto por 26 de largo y 12 de ancho aproximadamente.
- Formar un cilindro con todo el dulce de leche en el centro, evitando que toque las paredes o la base del molde para que no se pegue y/o queme.
- Cubrir con el resto de la masa.
- Llevar a horno con fuego medio durante media hora aproximadamente. Luego de ese tiempo, bajar el horno al mínimo durante cinco o diez minutos más para que se cocine bien el interior.
CONSEJITO
Al pisar las bananas, hay dos opciones: hacerlas puré sin ningún aditamento, para que queden bien homogéneas, o sumar el azúcar desde el principio. Pisándolas con azúcar, es más fácil que una parte de la banana se ablande rápidamente y el resto quede en pedacitos. Ambas opciones son buenas para hacer este pan y queda a criterio del cocinero.
Si la parte de afuera está bien dorada y el centro todavía está un poquito crudo, se puede apagar el horno y el pan se terminará de cocinar con el calor residual. Así se evita que el pan se queme por fuera o quede seco y se endurezca.
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